Andy Warhol y el Pop Art que democratizó el arte.

La Revolución Francesa permitió a la burguesía afirmarse como clase, no solo a nivel social y político; también a nivel cultural, lo que le permitió ver sus ideales propios representados en el arte y no solo los de la aristocracia. Este fenómeno que podíamos llamar democratización del arte, alcanzó su apogeo con otra revolución: la del Pop Art. El término «Pop» deriva del inglés «popular» y nos revela un arte accesible a todos, por lo menos desde un punto de vista conceptual.

Recientemente se ha inaugurado la exposición Andy Warhol, super pop, organizada por Next Exhibition y comisariada por Edoardo Falcioni, que nos permite adentrarnos en el mundo creativo de uno de los artistas mas poliédricos del siglo XX. La exposición hace un recorrido histórico y profesional a través de la trayectoria del artista y Pop Art.

La revolución warholiana no se limitó solo a innovar lo representado en el lienzo. Modernizó por completo la forma misma forma de hacer arte, es decir, la técnica con la que se realizaban las obras. La repetición y reelaboración de las imágenes, llevó a las técnicas de serialización, lo cual llevó a Warhol a convertirse, más, en una máquina que en un artista.

La razón por la que pinto de esta manera es porque quiero ser una máquina. Todo lo que hago, como una máquina, es lo que quiero hacer.

Andy Warhol

Andy Warhol, fue un artista plástico y actor americano que desempeñó un papel crucial en el desarrollo del Pop art. Tras una exitosa carrera como ilustrador profesional, Warhol adquirió fama mundial por su trabajo en pintura, cine de vanguardia y literatura, que se vio acrecentada por saber escuchar las ideas que le proponían, una relación importante con los medios y por el rol de gurú de la modernidad.

Tal vez, por ello, es la existencia del museo Andy Warhol, el museo más grande de Estados Unidos dedicado a un solo artista del Por Art, aunque la polémica le acompaño siempre y algunos críticos consideraban sus obras «pretenciosas y bromas pesadas»

El Pop Art, camino que habían abierto las obras de Rauschenberg y Johns, superó todas las barreras tradicionales del arte, convirtiéndose en una tendencia artística plenamente democrática, accesible a toda la población y que podía encontrarse en cualquier establecimiento.

Andy Warhol fue el tercer hijo de un matrimonio eslovaco emigrante en Estados Unidos. Mientras cursaba tercero de primaria, empezó a sufrir el popularmente conocido como baile de San Vito, el síndrome de Corea de Sydenham.

Esta enfermedad, que provoca movimientos incontrolados de las extremidades y desórdenes en la pigmentación de la piel le obligó a pasar buena parte de su infancia en la cama. Mientras estaba postrado dibujaba, oía la radio y coleccionaba imágenes de estrellas de cine. El artista siempre definió esta etapa como muy importante en el desarrollo posterior de su personalidad, sus habilidades y sus gustos.

En 1949 se traslada a Nueva York para iniciar su carrera como ilustrador de revistas y publicista. Durante los años 1950 ganó cierta reputación gracias a sus ilustraciones para un anuncio de zapatos. Dibujos a tinta, bastante sueltos y emborronados que fueron expuestos en la galería Bodley de Nueva York. Pero a finales de la década de 1950, Warhol no había descubierto un tema o estilo personal sobre los que fundamentar su carrera.

Probablemente las experiencias que lo llevaron a acercarse a la generación de artistas Pop neoyorquinos, como Paolozzi, Hamilton y Rauschenberg ,tuvieron lugar en la primavera de 1960, cuando Warhol compró un pequeño dibujo de Jasper Johns de una bombilla. Más adelante pudo ver un gran lienzo pintado por Roy Lichtenstein que reproducía un anuncio de un complejo turístico en Catskill. A Warhol le impresionó ver cómo los artistas estaban pintando publicidad estereotipada.

Warhol comenzó a copiar los anuncios de la época sobre lienzo. Esta fue la primera señal de conciencia de la posibilidad de transformar la filosofía consumista de la época, en arte.

En 1960, realiza Coca Cola, obra en la que pinta la botella de forma simplificada y detrás el círculo del conocido logo. Pero, el artista, no quedó satisfecho con la obra, a la que seguía considerando demasiado subjetiva e influida por el expresionismo abstracto, tan de moda en Estados Unidos en ese momento.

Pero ninguna galería de New York quería exponer sus obras. En 1962 llegó su oportunidad. En la Irving Blum’s Ferus Gallery de Los Ángeles, se colocaron treinta dos obras del artista, Sopas Campbell, inspirándose en la comida que tomaba siempre que visitaba a su madre: una rebanada de pan y una lata de sopa Campbell. Al cerrarse la exposición el actor Dennis Hopper habría comprado una de las treinta y dos.

Esta obra, no solo define a Andy Warhol como artista, si no, que inicia el movimiento Pop Art y la obsesión del movimiento por la producción en masa y la cultura consumista.

Por fin, el artista había conseguido lo que tanto pretendía. Definir su estilo propio.

El poder que ejercía la obra se encontraba en realidad en la desapasionada frialdad que transmitía la aparente ausencia de la mano del artista. Su naturaleza repetitiva era una parodia de los métodos de publicidad contemporáneos, de su modo de penetrar en la conciencia del público para adoctrinarlo y persuadirlo a través del bombardeo continuo con la misma imagen.

Will Gompertz. Qué estas mirando?. 150 años de arte moderno.

Progresivamente, Warhol iría retirando referencias de sus imágenes hasta reducirlas a la representación icónica de una marca comercial, una celebridad o el signo del dólar. En cierto sentido, se trataba de devolver al arte el valor de cosa mentale, tal y como Leonardo la había definido ya en el Renacimiento.

Warhol se hacia eco de los nuevos movimientos artísticos que empiezan a partir de los años 60 y de los nuevos paradigmas que surgen ante los nuevos desafíos de la sociedad, en una época en la que impera la sociedad de masas. Warhol abrió las puertas a todo lo que ocurría fuera de las academias de arte. Porque el Pop Art desplaza el concepto de belleza a terrenos no explorados hasta ahora.

Andy Warhol huye de la idea convencional de que el arte debe ser raro y singular. Su obra estaba basada en la imitación del lenguaje visual de la sociedad de consumo americano.

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Su siguiente exposición fue en Nueva York, en la Galeria Stable, donde incluyó el Díptico de Marilyn.

En 1963 funda su estudio propio, The Factory, por donde pasarán artistas, escritores, modelos, músicos y celebrities underground del momento. Su obra empezó a ser muy conocida y desató ciertas polémicas sobre el papel del artista y la finalidad del arte.

Desarrolló imágenes personales a partir de objetos completamente impersonales, como billetes de dólar o nuevos productos de moda. Utilizaba imágenes propias de los periódicos, los carteles y la televisión compuesto de símbolos de la cultura estadounidense.​ La botella de Coca-Cola se convirtió, para él, en un tema pictórico sobre el que declaró:

Lo que es genial de este país es que Estados Unidos ha iniciado una tradición en la que los consumidores más ricos compran esencialmente las mismas cosas que los más pobres. Puedes estar viendo la tele, ver un anuncio de Coca-Cola y sabes que el Presidente bebe Coca-Cola, Liz Taylor bebe Coca-Cola y piensas que tú también puedes beber Coca-Cola. Una cola es una cola, y ningún dinero del mundo puede hacer que encuentres una cola mejor que la que está bebiéndose el mendigo de la esquina. Todas las colas son la misma y todas las colas son buenas. Liz Taylor lo sabe, el Presidente lo sabe, el mendigo lo sabe, y tú lo sabes.

Andy Warhol

Un evento crucial en la carrera del artista fue la exhibición The American Supermarket, una muestra celebrada en 1964 en la galería Paul Bianchinni. La exposición estaba organizada como el típico pequeño supermercado estadounidense, siendo los productos exhibidos obras de los artistas Pop Art del momento: Mary Inman, Robert Watts o Billy Apple.

Andy Warhol contribuyó con una pintura de una lata de sopa Campbell, valorada en 1.500 dólares. Lo curioso de la obra es que la lata solo costaba 6 dólares.

La importancia de la exposición recayó en que fue uno de los primeros actos públicos en los que se confrontó al público con el Pop art y la cuestión planteada por las vanguardias clásicas acerca de qué podía ser arte.

Warhol recurrió a asistentes para aumentar la productividad de su taller artístico. Esta colaboración también planteó una gran polémica sobre sus métodos de trabajo y su valor como arte, especialmente durante los años 1960. 

Uno de los colaboradores más importantes fue Gerard Malanga poeta, fotógrafo y director de cine quién le ayudó en la producción de serigrafías, películas, esculturas y otras obras producidas en The Factory.

El 3 de junio de 1968, Andy Warhol sufre un atentado. La escritora feminista americana, Valerie Solanas conocida por escribir el Manifiesto SCUM (Society for Cutting Up Men Manifesto)  dispara al artista a la entrada de su estudio.

Parece ser que Solanas había propuesto a Warhol producir una obra suya y le mandó el guion. Después de acusar al artista de querer quedarse con su trabajo le disparó dos veces dejándole muy grave.

antes de que me disparasen, siempre pensé que estaba un poco más para allá que para acá. Siempre sospeché que estaba viendo la tele en vez de vivir la vida.

declaración de Warhol tras el atentado.

Los años 70 fueron tranquilos para Andy Warhol, aunque se convirtió en un emprendedor rodeado de grandes artistas, nuevas estrellas y personajes famosos, en general.

Realizó muchos retratos a personajes famosos: Mick Jagger, Liza Minnelli y John Lenon, clientes habituales de la discoteca Studio 54. Y del propio líder comunista Mao Zedong.

Produce su serie Ladies & Gentlemen, en la que incluye a la comunidad Drag Queen y transexual de Nueva York, visibilizando temas como la sexualidad y la opresión.

Recibió algunas críticas poco favorables sobre sus exposiciones de retratos de celebridades de estos años que tachaban su obra de superficial, fácil, comercial y carente de profundidad.

​Su estilo rupturista fue progresivamente asimilado por el circuito de galerías y por los círculos adinerados, a los que satisfacía con retratos por encargo.

Es también, en esta época, cuando es contratado por varios fabricantes de automóviles para pintar sus vehículos de competición de una manera que llamen la atención, entre ellos la firma BMW, dando lugar al art car que daba lugar a vehículo con una apariencia modificada con la intención de reflejar una expresión artística personal.

Durante los años 80 Warhol remontó en los negocios, debido a la estrecha relación que mantuvo con algunas de las nuevas figuras del arte, entre ellas Jean-Michel Basquiat, Julian Schnabel, David Salle y otras figuras del llamado neoexpresionismo. 

Apadrinó al explosivo Jean-Michel Basquiat cuando este apenas era conocido manteniendo una relación muy especial durante toda su vida.

Durante 1981 comenzó a pintar detalles de cuadros de artistas renacentistas como Da Vinci o Botticelli.

Sigue produciendo abundantes retratos de celebridades y magnates, no solo amistades o gente de su círculo, sino también diseñadores, empresarios y demás gente adinerada, que por grandes sumas posan para Warhol.

Warhol murió en Nueva York un 22 de febrero de 1987 de madrugada. Según su última voluntad, se constituyó la Andy Warhol Foundation for the Visual Arts.

La fundación no solo sirve como representante legal de Andy Warhol, sino que defiende su misión de «espolear la innovación en la expresión artística y el proceso creativo», y se declara «centrada, principalmente, en apoyar el trabajo de un valor experimental o rompedor».

• Exposición: Andy Warhol, Super Pop.
• Dónde? Palacio de Santa Barbara. Calle de Hortaleza, 87
• Cuándo? del 12 de febrero a 5 de junio de 2022.

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